‘Ney’ y el carismático Jorge Jesus, que optaba al banquillo de Brasil, son dos gallos que no están acostumbrados a ceder cuotas de poder
El Al-Hilal debutó en la Champions asiática con un decepcionante empate… y se desconoce cómo pueden reaccionar los dirigentes saudís ante los malos resultados
Desde la distancia, el Brasil futbolístico observa con curiosidad cómo evolucionará la relación entre Neymar Jr. y su entrenador en el Al-Hilal, el carismático Jorge Jesus. Se prevé conflicto. Son dos pesos pesados, dos gallos con personalidades fuertes que no están acostumbradas a ceder cuotas de poder, como ha quedado explicitado a lo largo de sus sendas carreras profesionales.
El técnico portugués, que lo ganó todo con el Flamengo entre 2019 y 2020, optaba al banquillo de la Seleçao y aún no ha digerido que la CBF se decantara por Fernando Diniz, como puente antes de la supuesta llegada de Ancelotti. Y, a las primeras de cambio, metió cizaña.
Cuando ‘Ney’ fue convocado para la última fecha FIFA, reaccionó diciendo que el ‘10’ aún no estaba para jugar. Lo cierto es que el ex del PSG regresó a los terrenos de juego, tres más de siete meses de ausencia por su lesión en el tobillo drecho, antes con la Seleçao que con su nuevo club.
Completó con la ‘Canarinha’ los partidos de clasificación para el Mundial 2026 contra Bolivia, donde hizo un partidazo marcando un ‘doblete’, y Perú. Se entendió a las mil maravillas con Fernando Diniz.
Deportivamente, Jorge Jesus (y también Neymar) vivió este lunes su primera gran decepción. Con el exblaugrana Malcom y Ruben Neves (el que sonó para el mediocentro blaugrana), en el once titular, su debut en la fase de grupos de la Champions asiática se saldó con un frustrante 1-1 en casa ante el Navbahor, de Uzbekistán. Todo es nuevo en Arabia y se desconoce cuál es la paciencia de los directivos saudíes ante reveses deportivos.